Muchas comunidades de vecinos están optando por instalar, en sus zonas comunes, sistemas de videovigilancia que les permitan mejorar la seguridad y garantizar el buen uso de sus instalaciones.
Sin duda, ésta es la mejor opción que la comunidad de vecinos puede llevar a cabo puesto que, al contar con ella, muchos de los problemas, conflictos o incidencias que suelen sucederse, quedan resueltos con la prevención y la grabación de las imágenes.
Pero no cualquier tipo de sistema de videovigilancia sirve, pues es necesario que se cumplan con unas normas reguladas por la ley y que, además, la gestión y mantenimiento de los elementos instalados estén correctamente tratados por empresas homologadas.
En este post vamos a explicar cuáles son las causas y consecuencias de los fallos en un sistema de videovigilancia mal gestionado y cómo pueden repercutir en las comunidades de vecinos.
Problemas que podemos solucionar con la instalación de cámaras de seguridad
Con la instalación de un buen sistema de videovigilancia son muchos los problemas o incidencias que se pueden prevenir y evitar. Entre ellos, por ejemplo, los actos vandálicos, los robos y hurtos en la comunidad, e incluso en las propias viviendas y el uso indebido o incorrecto de las instalaciones o zonas comunes.
Además, también son un gran mecanismo disuasorio para evitar que se lleven a cabo todo tipo de actividades prohibidas o ilegales dentro de la comunidad.
Por otra parte, en Digital Mantenimientos trabajamos también con las cámaras antivandalismo, un sistema complementario a las cámaras de seguridad que nos permite detectar las incidencias de manera remota. De esta forma, garantizamos la máxima tranquilidad a las comunidades de vecinos, ya que con nuestro C.R.I (Control Remoto de Incidencias) podemos asegurar un servicio de seguimiento activo de las cámaras de videovigilancia los 365 días del año de forma ininterrumpida
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¿Por qué pueden fallar las cámaras de videovigilancia?
Como hemos comentado anteriormente, algunas Comunidades de Vecinos están optando por instalar, ellos mismos, sus propios sistemas de videovigilancia. Esto es, sin duda, un gran error, puesto que puede acarrearles serios problemas legales. Pero, además, también están elevando los riesgos de sufrir averías que, finalmente, concurrirán en fallos que podrían haberse evitado.
Los principales fallos pueden venir derivados del uso para la instalación de material doméstico, no aptos para el fin que se les va a dar. O que sean los propios vecinos, y no una empresa homologada, quienes lleven a cabo las instalaciones.
Otro problema que también puede ocurrir es que, aún habiendo recurrido a una empresa homologada, la comunidad no notifique la avería en alguno de los mecanismos. Problema que sin duda se soluciona llevando a cabo los mantenimientos adecuados y recomendados por la empresa homologada y la atención de los vecinos y el Presidente de la Comunidad.
Consecuencias de los fallos en las cámaras de videovigilancia
La consecuencias de los fallos que hemos comentado anteriormente, pueden causar graves repercusiones en la comunidad de vecinos.
A continuación, desde Digital Mantenimientos vamos a explicar los principales, para que tu comunidad pueda estar bien informada de todo lo que puede acarrear no contar con un buen servicio.
Invalidación de imágenes
Cuando una Comunidad de vecinos quiere llevar a cabo la instalación de sistemas de videovigilancia, es necesario que conozca, previamente, cuáles son los aspectos del derecho administrativo que regulan esta posibilidad.
En primer lugar, es fundamental saber que todo sistema de videovigilancia debe respetar los derechos fundamentales de protección de datos y el derecho a la propia imagen. Para ello, la Agencia de Protección de Datos creó la instrucción 1/2006, que aplica en el tratamiento de personas físicas o identificables en grabación, captación, transmisión, conservación y almacenamiento de las imágenes.
Si no se cumplen con las indicaciones legales, las imágenes pueden ser invalidadas, así como si, por ejemplo, si no se han colocado los carteles de tipo informativo, o no se cuenta con la aprobación del mínimo exigido del 60% que estén de acuerdo con la instalación, como se establece en el artículo 17.3 de la Ley de Propiedad Horizontal.
Otro aspecto fundamental es que los sistemas de videovigilancia no podrán, bajo ningún concepto, tomar imágenes de la vía pública.
Robo o sabotaje de las grabaciones
El protocolo establecido por la Ley de Seguridad Privada y la Ley Orgánica de Protección de Datos contempla también la posibilidad de que las imágenes puedan ser robadas o saboteadas. Por ello, determina que el sistema de grabación debe permanecer en un lugar seguro y protegido, no transmitirse vía internet y contar con una contraseña personal e intransferible que sólo puede conocer la persona autorizada a tal efecto.
Además, las imágenes sólo podrán conservarse por un plazo máximo de 30 días.
Imágenes no disponibles
No contar con el soporte de una empresa homologada para la instalación y el mantenimiento de los sistemas de videovigilancia puede ocasionar, también, que cuando sea necesario recurrir a las imágenes éstas no estén disponibles. Y que, por tanto, no haya servido de nada contar con ellas.
Pérdida de la custodia de las imágenes
Lo mismo que en el punto anterior sucede con la pérdida de la custodia de las imágenes, puesto que una empresa homologada, como Digital Mantenimiento, puede gestionar debidamente y custodiarlas para evitar futuros problemas, fallos o inconvenientes.
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Soluciones para evitar fallos en la instalación de sistemas de videovigilancia
Con todo lo anteriormente explicado, sin lugar a dudas la mejor solución para evitar cualquier fallo en la instalación y posterior seguimiento de los sistemas de videovigilancia es contar con el soporte de una empresa debidamente homologada que lleve a cabo las instalaciones con equipos profesionales, técnicos especialistas y cumpliendo todas las normativas vigentes.
Además, el mantenimiento de los aparatos y sistemas instalados es clave, puesto que permiten que el uso sea el correcto y las imágenes captadas puedan utilizarse, conservarse y tratarse adecuadamente en caso de ser necesarias.
Con la ayuda y el soporte de Digital Mantenimiento, todo el trámite de instalación y mantenimiento de los sistemas de videovigilancia es mucho más sencillo para las comunidades de vecinos que trabajan con nosotros.
Nuestros asesores analizan cuáles son las necesidades específicas de cada comunidad y realizan los presupuestos en base a ellas. Además, nuestros sistemas son escalables, pudiendo mejorar y adaptar los aparatos en base a las nuevas necesidades que puedan ir surgiendo con el tiempo y adaptándolos a las nuevas tecnologías.